Es delicioso.
Como una canción cantada a pleno pulmón, así como con los ojos cerrados, así como pensando en hacer una locura...
¿Y hacerla? Pues ya veremos.
De momento, paciencia y a disfrutar, que parece que la primavera quiere hacerse oír esta vez.
Con especial dedicación a todos y todas los locos y locas (siempre en el buen sentido) que obligan a este mundo a no pararse.