Lo sabes todo y nada. Desde tu punto de vista tan limitado. Aprende a escuchar las voces serenas de los buenos consejeros. No es culpa tuya, pero sólo tú puedes poner remedio. Tan fácil como sentirse libre haciendo libres a los demás.
Aunque quisieras darle mil vueltas al mundo, aunque quisieras poder controlar el ya y el ahora. Date tiempo, pero prepárate para cuando llegue el momento. Llegará. No hay deuda que no se salde, recuérdalo siempre.
Y entre tanto, léete cada día. Artista que sólo dibujaste sonrisas, vela por que no las borre el tiempo. Atrévete a llegar hasta el corazón más tímido, pero no lo toques. Deja que se abra ante ti, dale un beso y sigue volando...
Escrito por Dorian a las 27 de Mayo 2005 a las 11:41 PM